¡Mi adorado hijo Santiago, Qué grande y que pequeño fuiste a la vez! Siempre estarás en mi corazón. Fui afortunada de llevarte este tiempo en mis entrañas, me convertiste en Madre y me ensenaste a ver la vida de una forma diferente. Dios es el único dueño de la vida y mi corazón y confianza, descansan en Él y en su perfecta voluntad. Te amo hijo de mi alma. ¡Cuánto fruto dio tu corta vida, mi amor! Doy gracias a Dios por pensar en mí para llevarte en mi seno. Doy gracias porque ya eres parte de mi historia, y la de todos, los que por siempre te amaremos. Hasta Siempre, mi pequeño gran amor.
Wages & Sons Gwinnett Chapel
Gwinnett Memorial Park
Visits: 0
This site is protected by reCAPTCHA and the
Google Privacy Policy and Terms of Service apply.
Service map data © OpenStreetMap contributors